martes, 23 de abril de 2013

Trucos para mejorar tu aspecto

http://www.youtube.com/watch?v=e1ENVVgg3Tw

Consejos para cuidarte durante la radioterapia

http://www.youtube.com/watch?v=qhLV-_Rzv-c

Consejos para cuidarte durante la quimioterapia

http://www.youtube.com/watch?v=ZZYIr4IDT4U

El cáncer de cérvix se puede prevenir...


Tratamiento III

Radioterapia



 a)   Radioterapia interna: Es una técnica que  consiste en la colocación de materiales radiactivos próximos a la zona tumoral. Se colocan en la cavidad uterina y/o en la vagina. Su objetivo es destruir las células tumorales causando el menor daño posible a los tejidos sanos que rodean dicho tumor. En este caso este tipo de técnica es recomendable en mujeres que no puedan someterse a cirugía. La radioterapia interna puede requerir que el paciente permanezca en el hospital. Casi siempre se administra en una de las dos formas descritas a continuación:


 b)    Radioterapia externa: La radioterapia (también llamada terapia con rayos X o irradiación) es el uso de un tipo de energía (llamada radiación ionizante) para destruir las células cancerosas y reducir el tamaño de los tumores.


 
 
Alrededor de la mitad de los pacientes con cáncer reciben algún tipo de radioterapia. Se puede usar la radioterapia sola o en combinación con otros tratamientos de cáncer, como la quimioterapia o la cirugía. En algunos casos, es posible que el paciente reciba varios tipos de radioterapia.

Tratamiento II

Quimioterapia

La quimioterapia es un tratamiento contra el cáncer cuyo objetivo es destruir las células que componen el tumor, con el fin de lograr la reducción de la enfermedad. A los fármacos empleados en este tipo de tratamiento se les denomina fármacos antineoplásicos o quimioterápicos. Estos fármacos llegan prácticamente a todos los tejidos del organismo, y ahí es dónde ejercen su acción, tanto sobre las células malignas como sobre las sanas. Debido a la acción de los medicamentos sobre estas últimas, pueden aparecer una serie de síntomas, más o menos intensos y generalmente transitorios, denominados efectos secundarios.

En general, la quimioterapia actúa en la fase de división de la célula tumoral impidiendo su multiplicación, y destruyéndolas.

La finalidad de la quimioterapia puede variar en función del tipo de tumor, de la fase en la que se encuentre dicho tumor y el estado general del paciente, existen dos tipos principalmente:
  • Curativa: en este caso, la intención de la quimioterapia es curar la enfermedad, pudiéndose emplear como tratamiento único o asociado a otros. Un paciente se considera curado cuando no existe evidencia de células tumorales durante mucho tiempo. 
  • Paliativa: con la quimioterapia se pretenden controlar los síntomas producidos por el tumor. Su objetivo primordial es mejorar la calidad de vida del enfermo y, si fuera posible, aumentar también su supervivencia.
El médico oncólogo, es el que decide qué tipo de fármacos y qué dosis es necesario administrar en función de una serie de factores como pueden ser: Tu estado general, enfermedades previas (cardiopatía, enfermedades vasculares, etc...) ,tipo de tumor, fase de la enfermedad y localización del tumor.

 

La quimioterapia se administra en forma de ciclos, alternando periodos de tratamiento con periodos de descanso. Un ciclo es, por tanto, el periodo de administración del tratamiento y el de descanso, hasta la siguiente administración.

Esta alternancia de “tratamiento – descanso” es fundamental para proporcionar a las células sanas del organismo el tiempo necesario para recuperarse del daño provocado por los medicamentos empleados, de tal forma que sean capaces de tolerar un nuevo ciclo de tratamiento, con una toxicidad o efectos secundarios aceptables.

Dependiendo del tipo de cáncer y de los fármacos que se vayan a emplear, la quimioterapia puede administrarse por dos vías diferentes: intravenosa u oral.

a)     Vía intravenosa: Los fármacos se introducen en el organismo a través de una inyección en la vena, generalmente del brazo (infusión). Es la vía de administración más frecuentemente empleada. En ocasiones, para evitar pinchar repetidamente una vena fina se emplea un tubo muy fino, largo y flexible, llamado catéter que se introduce desde una vena periférica hasta llegar a alcanzar una vena gruesa. Algunos fármacos citotóxicos tienen la posibilidad de dañar las venas, causando inflamación (flebitis); su administración por un catéter disminuye este riesgo. En otras ocasiones, estos fármacos se deben de administrar de forma continuada a lo largo de muchas horas, (lo que se denomina infusión continua), por lo que se hace necesario utilizar este tipo de catéteres.
El catéter permanece, sin ser retirado, durante todo el tratamiento. Con frecuencia está unido a un reservorio o port-a-cath (disco redondo de plástico o metal) que se introduce bajo la piel a nivel de la pared torácica anterior, siendo en este caso por donde se realiza la infusión de la quimioterapia. A través del port-a-cath es posible extraer sangre para la realización de análisis.
Para la infusión de los medicamentos se utilizan unas bombas de infusión que controlan el paso de la quimioterapia al interior del organismo de forma programada.

b)    Vía oral: El paciente toma por boca la medicación en forma de comprimidos o sobres. Esta vía sólo es posible para los fármacos que se pueden absorber por el estómago o intestino. Sólo es necesario el desplazamiento al hospital para el control periódico del tratamiento. Cada vez se emplea con más frecuencia, existiendo más fármacos citotóxicos capaces de ser absorbidos por el tubo digestivo.


Tratamiento I



Cirugía


  •  Procedimiento de escisión electroquirúrgica con asa (LEEP): elimina el tejido anormal usando un asa de alambre fino que transmite corriente eléctrica. Se puede hacer cuando se han identificado células anormales mediante una prueba de Papanicolau, una colposcopía o una biopsia. Es eficaz en el 90% de los casos.  


  • Por cirugía laser: en la que se realizan cortes para extraer una muestra muy superficial de     tejido afectado. 
 
  • Conización o biopsia de cono: Tratamiento quirúrgico donde se realiza una incisión en forma de cono, utilizando bisturí quirúrgico o radiocirugía para extraer la zona premaligna en su totalidad. 




  • Criocirugía: Procedimiento durante el cual se congela un tejido para destruir las células anormales. Generalmente, se realiza con un instrumento especial que contiene nitrógeno líquido o dióxido de carbono líquido para congelar el tejido. En la crioterapia se utiliza una temperatura extremadamente baja para destruir el tejido anormal. Estas células anormales muertas luego son eliminadas a través de la vagina, siendo reemplazadas por nuevas células normales en el cérvix. La eliminación de estas células anormales precancerosas evita que continúen mostrando cambios que eventualmente podrían ser la causa de cáncer del cérvix. La crioterapia es un procedimiento sencillo que no requiere cortar los tejidos afectados. 
 
  • Histerectomía radical: Es una técnica quirúrgica donde se extirpa el útero, el cuello uterino y parte de la vagina. Se realiza en el caso de mujeres que no deseen tener hijos o debido a su edad no puedan.
 
  • Histerectomía total: cirugía para extirpar el útero  y el cuello del útero se puede realizar de manera vaginal o abdominal.
 
  • Salpingooforectomía bilateral: cirugía para extirpar ambos ovarios y ambas trompas de Falopio.
 
  • Exenteración pélvica: cirugía para extirpar la parte inferior del colon, el recto y la vejiga. En las mujeres también se pueden extirpar el cuello uterino, la vagina, los ovarios y los ganglios linfáticos cercanos. Se hacen aberturas artificiales (estomas) para que se pueda expulsar fuera del cuerpo la orina y la materia fecal hacia una bolsa de drenaje. Tal vez se necesite cirugía plástica para hacer una vagina artificial después de esta cirugía.